En los años 80 Hollywood nos trajo varias películas en las que una pareja de policías cumplía con su deber de capturar a los malos. Entre ambos protagonistas se establecía una especie de relación amor-odio que al final era dominada por la amistad inquebrantable.
Y a veces, se sustituía a uno de los dos policías humanos por un perro. Es el caso de Socios y Sabuesos, con Tom Hanks; K-9 con James Belushi y hasta Chuck Norris tuvo que enseñar modales a un compañero canino, en Top Dog: El Perro Sargento, ya en la mitad de los 90.
Ahora nos llega una película de poli y perro, pero desde Japón. Bueno, lo de que nos llega es un decir, porque sabemos cómo está el tema de traer estas películas a nuestro país. Aunque sí es fácil encontrar versiones subituladas en inglés en el mercado americano, del que nos nutrimos los aficionados a este tipo de cine.
Dog X Police nos cuenta la aventura de Yusaku, un joven policía que sueña con ser detective, pero que tiene que conformarse con ser entrenador de perros policías. Un perro albino, Shiro, le llama la atención y comienza a entrenarlo, pese a que nadie apuesta por el pobre animal. Cuando se produce un aparatoso atentado terrorista, ambos comenzarán la búsqueda del responsable de la colocación de los explosivos.
Fuente: Beyond Hollywood
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